El cine de terror de la vieja escuela ha dejado huella en las nuevas generaciones cinéfilas, generaciones que han crecido con los personajes más célebres de éste mencionado género. Y entre todos esos jóvenes que crecieron en aquella gloriosa época, sólo algunos, han desarrollado la calidad suficiente para lograr ser realizadores y poder ofrecernos sus propios trabajos. Hablamos de una gran cantidad de reconocidos cineastas, como Rob Zombie, Alexandre Aja, Tom Six o el mismísimo Eli Roth (aunque éste último, no sea santo de nuestra devoción) entre otros. En esta ocasión, hablaremos de Adam Green y su atractivo producto, Hatchet (2006) y “Hatchet: II” (2010).
Nos encontramos ante un trabajo de lo más gamberro, donde la sangre y la violencia explicita, es su máximo exponente. Un claro homenaje al cine slasher de los años 80; “Halloween” (1978), “Sleepaway Camp” (1983) y sobre todo, a la conocida saga del personaje de la máscara de hockey, “Viernes 13”(1980-2009). Aunque éstos títulos sean los más representativos de la cinta, también podemos ver curiosas pinceladas (principalmente al concepto estético del personaje) a “Las colinas tienen ojos” (1977), “KM 666” (2003) y especialmente, al film dirigido por David Lynch, “El hombre elefante” (1980), basado en la historia real de Joseph Merrick, un hombre gravemente deformado que vivió en Londres durante el siglo XIX. Ante todo, Hatchet lo deja bien claro en la inscripción de su propia carátula: “No es un remake, no es una secuela y tampoco está basada en una japonesa. ‘Hatchet’ Horror americano de la vieja escuela”.
Un grupo de turistas se embarcan en lo que parece, una expedición hacia lo desconocido. En su afán por conocer, buscarán explicaciones a supuestos maleficios voodoo. Adentrados en el oscuro y tenebroso lago de New Orleans (Luisiana), se toparán con el fantasma Victor Crowley. La leyenda del lugar narra la terrible historia del desfigurado niño que vivía con su padre en un pequeño establo de madera, junto al pantano. El joven Victor Crowley y debido a su deformidad, siempre fue el hazmerreír para el resto de los niños, que, consecutivamente, empleaban bromas de muy mal gusto hacia su persona.
La tragedia para la familia Crowley estaría apunto de acontecer, cuando Thomas Crowley, descubre su hogar en llamas. En el interior, se encuentra su hijo apunto de morir abrasado. Thomas, intentará abrir la puerta con un hacha y apaciguar el fuego, pero tras un fatídico accidente, acabará por clavar el arma en el rostro de su primogénito. Debido a la catástrofe familiar, el padre entrará en una enorme depresión y permanecerá encerrado en casa hasta el fin de sus días. Desde entonces, el fantasma de Victor Crowley regresa de la tumba en busca de su padre. En sus apariciones, acabará con todo aquél que se cruce por su camino, con los métodos más grotescos y sanguinarios.
La tragedia para la familia Crowley estaría apunto de acontecer, cuando Thomas Crowley, descubre su hogar en llamas. En el interior, se encuentra su hijo apunto de morir abrasado. Thomas, intentará abrir la puerta con un hacha y apaciguar el fuego, pero tras un fatídico accidente, acabará por clavar el arma en el rostro de su primogénito. Debido a la catástrofe familiar, el padre entrará en una enorme depresión y permanecerá encerrado en casa hasta el fin de sus días. Desde entonces, el fantasma de Victor Crowley regresa de la tumba en busca de su padre. En sus apariciones, acabará con todo aquél que se cruce por su camino, con los métodos más grotescos y sanguinarios.
El film nos aporta fascinantes «cameos» (la mayoría de ellos, leyendas del cine de terror), veremos las caras de Robert Englund (AKA Freddy Krueger), Tony Todd (AKA Candyman) y Kane Hodder (AKA Jason Vorhees). En Hatchet, Kane Hodder personifica dos papeles, Victor Crowley y el propio padre de éste, Thomas Crowley. Dicha anécdota, sucede cuando Adam Green contacta con Kane para interpretar a V. Crowley, dado que el personaje no tenía diálogo y estaría completamente maquillado, el propio Kane, comentó a Adam si además del psicópata podría ofrecerle otro personaje, Green aceptó la propuesta y le permitió interpretar al progenitor T. Crowley.
Hatchet: II (2010) inicia donde acabó su predecesora; la secuencia de la barca donde la pobre Marybeth era atacada por el fantasma (escena que notaremos un claro homenaje a ‘Viernes 13’ de 1980), es decir, desde el primer minuto del metraje, tendremos a Victor Crowley haciendo de las suyas. De una forma asombrosa, Marybeth sobrevive al duro enfrentamiento con Crowley y es rescatada por un lugareño que, pocos minutos después, le obligará -a punta de fusil- a abandonar su cabaña. Marybeth, la única superviviente de la masacre ocurrida en el lago de New Orleans, se dirigirá al establecimiento responsable del fatídico tour, llamado “Voodoo Shop”, donde espera que su coordinador, el Reverendo Zombie (Tony Todd), pueda ofrecerle explicaciones de lo sucedido. Tras una larga discusión, le suplicará ayuda para organizar una nueva búsqueda. La joven ansía el momento de capturar y matar a Victor Crowley, o como la propia Marybeth asegura, “clavar esa hacha en su jodida cara”. Marybeth y el Reverendo, fundarán un equipo de cazadores que intentarán acabar, de una vez por todas, con el terrible personaje. El Reverendo Zombie, desea acabar con Crowley por un interés económico, puesto que, lo considera una gran amenaza para el futuro de su negocio. En cambio, Marybeth sólo quiere venganza. No obstante, los rifles de los cazadores no serán suficientes para acabar con la vida de Victor Crowley. Ha regresado con sed de sangre y pronto conocerán la muerte a manos del psicópata de rostro desfigurado.
Hatchet II es una segunda entrega un tanto espesa. Su comienzo es realmente bueno; escalofriante, perturbador y salvaje. Sin embargo, la cosa cae en picado y durante los próximos 50 minutos de cinta tendremos una trama aburrida, donde el asesino principal no tiene ningún protagonismo.
No hay mal que por bien no venga, y en esta larga espera de Victor Crowley, nos explicarán la historia completa éste; el conjuro que realiza la señora Crowley, su trágico nacimiento, los verdaderos causantes del incendio y el brutal accidente que cobraría con su propia vida. Tras conocer el espeluznante relato, ¡llegaremos a sentir compasión por el mismísimo psicópata!
Por suerte, hacia el último fragmento de la película, vuelve Victor Crowley, y con él, sus macabros asesinatos.
La actriz que interpreta a la protagonista Marybeth es Danielle Harris, conocida por participar en diversos títulos de la franquicia Halloween; “Halloween 4: El Regreso de Michael Myers” (1988), “Halloween 5: La Venganza de Michael Myers” (1989), en los documentales dirigidos sobre dicha saga; “Halloween: 25 Años de Terror” (2006), “Halloween: Desde Dentro” (2010) o en las realizadas por el director anteriormente mencionado, Rob Zombie; “Halloween: El Origen” (2007) y “Halloween 2” (2009). A diferencia de su antecesora entrega, Tony Todd goza de más protagonismo y puede que esto juegue una baza en su contra, ya que como actor, su registro interpretativo deja mucho que desear. Por nuestro bien, intentaremos conservar en la memoria su célebre papel como Candyman y olvidaremos este tipo de trabajos. También recalcamos el curioso cameo de Lloyd Kauffman, conocido director y productor de Estados Unidos que junto a Michael Hertz fundó la productora independiente, Troma Entertainment.
Cabe destacar el magnífico film que nos ofreció Adam Green antes de Hatchet II, «Frozen» (2010); donde nos introduce en la agonía de encontrarse sobre un telesilla de una solitaria estación de esquí cerrada durante todo el fin de semana. Terror y angustia en estado puro.
Actualmente se encuentra produciendo la última entrega del fantasma de Victor Crowley, Hatchet III (2013), que será estrenada este mismo año. Adam Green se encarga del guión y la producción. En la dirección se encargará BJ MCDonell, donde debutará como director. Como cámara tiene un buen currículum profesional, ha trabajado en «Los renegados del diablo» (2005), «La casa del terror» (2006), «Hatchet» y «Hatchet II», «Halloween» (2009), «Pesadilla en Elm Street» (2010), «The Collection» (2012), etc.
Hatchet, como hemos mencionado al principio de nuestro artículo, nos encontramos ante un trabajo particularmente dedicado a todos los amantes del cine slasher de los años 80. Grandes dosis de gore explícito, con muertes de lo más originales y variopintas.
4 comentarios
La primera tarda un poco en arrancar, como casi cualquier slasher, pero mantiene un buen ritmo. Aunque en la segunda estamos totalmente de acuerdo. Para mí lo realmente apetecible son los últimos veinte minutos. El resto se hace especialmente denso, aún explicando el origen del personaje. Y mira que a mí me gusta que me expliquen los origenes. Todd siempre será Candyman.
Cuando vi Frozen (que me gustó bastante) tuve serias dudas si Adam Green era en verdad su director. Es tan diferente de Hatchet.
Por cierto no sabía que estuviera planeando la tercera. Creo que agotará el producto.
Puede que sí, y me atrevería a decir que, su segunda entrega ya fue un simple interés económico.
"Frozen" es increíble.
Eso daría igual sino hubiera sido tan aburrida la primera hora. Por fín doy con alguien cercano que le gusta Frozen.