El ocultismo y la adoración por Satanás siempre han sido de las temáticas más utilizadas en la gran mayoría de títulos del cine fantástico y de terror. Se tiene constancia que una de las principales obras cinematográficas en tratar el tema fue “Háxan” (1922) de Benjamin Christensen, por primera vez veríamos al demonio en la gran pantalla.
En la década de los 60, empezaría a causar efecto entre la sociedad y la opinión pública, donde el aumento de sectas y creencias cuyo mayor exponente consistía en efectuar extraños rituales demoníacos, causarían una gran repercusión mediática. Y como no es de extrañar, rápidamente el séptimo arte nos mostraría sus propios relatos.Fue entonces cuando nos ofrecieron trabajos conocidos por la mayoría de los mortales y consideraros (en más de una ocasión) por situarse en el vértice del subgénero demoníaco, “La semilla del diablo” (1968) de Roman Polansky o “El Exorcista” (1973) de William Friedkin, son las obras más representativas de la época. Pero sin lugar a dudas, existen muchísimas más cintas igual de interesantes.
Nuestra apreciada e indomable Hammer no dejaría escapar la temática satánica y decidió, una vez más, participar junto al realizador predilecto de la productora, Terence Fisher. Confiaban en él, y en la propia filmografía del cineasta, aparecen nada más y nada menos que 27 títulos unidos a la Hammer, entre los que se encuentran; “La maldición de Frankenstein” (1957), “Drácula” (1958), “La momia” (1959), “Las novias de Drácula” (1960), “El fantasma de la Ópera” (1962) o “Drácula: El príncipe de las tinieblas” (1966).
Coincidiendo con el mismo año que la obra de Polansky, Terence Fisher nos ofreció «The devil rides out” (La novia del diablo, 1968), cinta basada en la novela de Dennis Wheatley y donde volveremos a ver al emblemático Cristopher Lee como el auténtico artífice de la trama.
Nada más empezar, ¡atención a los magníficos créditos iniciales! A través de los cuales, apreciaremos símbolos paganos, pentagramas y la estampa del mismísimo Baphomet.
Llevados por el afán de conocer más allá, Richleau, insiste a Simon que le enseñe el famoso observatorio que posee en la planta superior, Simon se niega rotundamente, pero, varios minutos después -y casi de forma obligada-, decide mostrárselo. Richleau y Rex, observan un enorme pentagrama en el mismo suelo de la habitación y que, tras unos extraños ruidos en el interior de un antiguo armario de madera, contemplarán como en su interior, mantienen retenidas a un par de gallinas. Los animales encerrados y la enigmática simbología abrirán los ojos al Duque de Richelause que, percibirá de forma inmediata, la tapadera de la supuesta asociación astrológica. Nuestros dos protagonistas decidirán llevarse al joven Simon a un lugar más seguro.
Pronto se introducirán en la terrorífica secta liderada por Mocata y se toparán con el enorme poder que posee para dominar la mente humana, la fórmula que emplea para lavar el cerebro de las víctimas que, posteriormente, serán sacrificadas. Macabros rituales y misas negras en las que cobran la vida de personas inocentes en honor al Diablo.
Muchos son los rumores y las especulaciones respecto a la repercusión que conllevó este trabajo, y esos mismos relatos explican las hipotéticas “amenazas” recibidas a gran parte del equipo técnico. “The devil rides out” (La novia del diablo, 1968) nos introduce en el oscuro mundo del ocultismo y el satanismo más terrorífico, una atractiva mezcla explosiva ofrecida por la mismísima Hammer.
12 comentarios
La pones bastante bien. No la he visto, es que en general me cuesta ver cine muy antiguo. Y no sabía que esas suspuestas orgías de las altas esferas, se llamaran el Club Bohemia.
Te la recomiendo. Quizás te gusta más que la versión que ha realizado (a su manera) Rob Zombie en "The Lords of Salem", Jajaja.
La de Rob Zombie no me gustó nada.
Lo sé, por eso lo decía. "The Lords of Salem" es una de las películas más debatidas, junto a "Holy Motors". No existe un público intermedio, la amas o la detestas.
De las más debatidas del pasado año 2012, quería decir.
No he escuchado posicionarte al respecto.
A mí me gustó, y mucho.
¿Y si no fuera de Rob Zombie también?. Yo creo que si no lo hubiera sido, no se la habría alabado tanto.
Hombre, soy crítico si algo no me gusta y tengo algo de criterio. Si no me hubiese gustado, no me gustaría sea quien fuere el director.
No he dicho lo contrario. Hablando en general, creo que muchas opiniones fueron favorables, por ser de quien es. No porque realmente hubiese gustado.
No la comparto, pero entiendo tú opinión. Yo opino lo mismo de Eli Roth.
Que a mucha gente (no toda) le gustó por ser de quien es, es un hecho, aunque te pese.